El cólico del lactante es un trastorno típico de los primeros meses de vida que se caracteriza por un llanto intenso y prolongado sin causa aparente.
Sin embargo, más que aliviar los cólicos del bebé, lo mejor es prevenirlos. Para que eso sea posible podemos poner en práctica los siguientes consejos:
- Haz eructar a tu bebé durante la alimentación, o antes de cambiar el pecho si lo estás amamantando.
- Haz eructar a tu bebé contra tu hombro, boca abajo en tu regazo o sentado derecho sobre éste, sosteniéndole el pecho y la cabeza a medida que le golpea suavemente la espalda.
- No juegues con tu bebé durante ni después de alimentarlo. Conviene hacer que el momento de la comida de un bebé sea lo más tranquilo y relajado posible.
- No acuestes a tu bebé después de alimentarlo. Mejor mantenerlo verticalmente apoyado en tu hombro, o sentadito en tu regazo.
- Asegúrate de que la tetina sea del tamaño adecuado para tu bebé, si utilizas biberón. Cuando la tetina es demasiado grande, puede llevar a que tu bebé coma demasiado y rápido. Y además, él podrá tragar aire.
- Si tu bebé es propenso a los gases, comente con el pediatra y pídale algún medicamento para aliviar los síntomas de los gases.
No hay comentarios:
Publicar un comentario